El precio de una vivienda normalmente tiende a fijarse de acuerdo al precio medio del mercado inmobiliario, es decir por la oferta y la demanda y de acuerdo con los parámetros correspondientes a su ubicación, características, metros cuadrados construidos, etc.
Determinar el precio al que se va a ofertar una vivienda no es una tarea simple y mucho menos depende de tu interés o valoración personal.
Hay que jugar con la aproximación y para esto es de gran apoyarse en la información y datos que brindan los portales inmobiliarios online; en los mismos podemos indagar el precio de venta de viviendas similares
(teniendo en cuenta los metros cuadrados, la ubicación y otras características relevantes).
A partir de esta indagatoria, es posible conocer la media de los precios del mercado y evitar fijar un precio muy por encima de esta cifra.
En relación al precio hay algunos aspectos que hay que considerar:
- No es cierto que inflando el precio, se aumenta el margen de negociación.
- Si el precio de nuestra vivienda es más alto que el promedio, lo que estamos haciendo es ayudar a los vecinos a vender las suyas.
- La cantidad de llamadas que recibimos, es una pista sobre lo acertado que es el precio.
Si la tarea resulta muy compleja y no se obtienen resultados en tiempos razonables, lo más recomendable es evaluar la posibilidad de pedir la valoración profesional de una inmobiliaria con conocimiento y experiencia en el mercado.