Con la llegada del frío y de la época de lluvia, suelen aparecer en algunos hogares dos de los problemas más comunes y molestos: la humedad y los malos olores que ésta provoca.
¿Sabes qué causa este problema en la mayoría de los hogares?
En general, la condensación de agua que da origen a la aparición de humedades es la mezcla de una serie de factores: desde un mal aislamiento en puertas y ventanas a defectos de construcción como grietas o escapes, pasando por algunas cosas tan sencillas como una mala ventilación.
5 consejos para evitar problemas de humedad:
1) Reparar cualquier escape y aislar bien ventanas y puertas para evitar filtraciones por el agua de lluvia y el frío.
2) Dentro del hogar generamos condensación… pero intenta en la medida de lo posible situar las fuentes que generan humedad hacia el exterior (no tender ropa dentro de casa, usar el extractor de la cocina, etc.).
3) Una medida muy sencilla es ventilar cada día la casa. Tan solo 10 o 15 minutos son suficientes.
4) Después de ducharnos, secar la zona de la ducha y las baldosas cercanas con un paño seco y ventilar el baño.
No esperes para ponerle freno a la humedad, antes de que aparezcan problemas incómodos.
