Cuando hace mucho calor, al cuerpo le cuesta más regular su temperatura, la cual puede elevarse a más de 37°C por deshidratación, agotamiento del sudor, o desajuste en el centro cerebral que controla la temperatura corporal.
El golpe de calor, es el sobrecalentamiento que sufre el cuerpo debido a las altas temperaturas.
Algunos de sus síntomas son:
• Aumento de la temperatura
• Sudoración excesiva
• Sensación de calor sofocante
• Sed intensa y sequedad en la boca
• Calambres musculares
• Agotamiento, cansancio o debilidad
• Dolores de estómago, inapetencia, náuseas o vómitos
• Dolores de cabeza
• Irritabilidad (llanto inconsolable en los más pequeños)
• Mareos o desmayo
¿Qué debemos hacer?
• Ofrecer agua fresca
• Ofrecer el pecho con más frecuencia a los lactantes
• Trasladarlos a un lugar fresco y ventilado
• Desvestirlos
• Mojarles el cuerpo con agua fresca
• Calmarlos y ponerlos a descansar
• CONSULTAR con su Pediatra o en un Centro de Salud
Para prevenir los golpes de calor, algunas recomendaciones son:
• Ofrecer a los niños agua o jugos naturales sin esperar a que los pidan
• Ofrecer el pecho más seguido a los lactantes
• No ofrecer bebidas con cafeína o azúcar en exceso
• No ofrecer bebidas muy frías
• No ofrecer líquidos o comidas calientes o pesadas
• Incorporar sal en mayor cantidad que lo habitual
• Bañarlos o mojarles todo el cuerpo con frecuencia
• Proponer actividades tranquilas
• Evitar que transiten y jueguen expuestos al sol, menos aún al mediodía o en las primeras horas de
la tarde. (entre las 10 y 16 horas)
• Si deben estar bajo el sol, ponerles sombrero, usar protectores solares (factor 30 o mayor) y tomar frecuentes descansos a la sombra
• Procurar que permanezcan en los lugares más frescos y ventilados
• NUNCA dejar a los niños dentro de un vehículo estacionado y cerrado
¿Quiénes tienen mayor riesgo?
• Menores de 5 años, especialmente los menores de 1 año.
• Niños que padecen enfermedades crónicas, cardíacas, renales, mentales o neurológicas
• Niños con fiebre por otra causa o diarrea
• Niños obesos o desnutridos
• Quienes tienen la piel quemada por el sol
