Cada vez son más las familias que cuentan con un miembro de cuatro patas en casa, por eso es común recibir consultas sobre si se aceptan mascotas en las casas en alquiler, específicamente perros o gatos que son las mascotas que se suman a las vacaciones familiares.
Obviamente es algo que genera duadas y resistencias, porque tiene sus aspectos positivos y negativos, y hay que sopesar ambos a la hora de tomar la desición. Para ayudarte, hemos hecho un par de listas que te invitamos a conocer.
Los aspectos positivos de tener mascota y dejar que ésta se aloje en vacaciones con sus dueños son muchos, y el más importnte es posiblemente que mejora la experiencia del inquilino.
Otros aspectos positivos son:
– Los animales son muy afectuosos y ejercen una influencia positiva sobre el ánimo de sus compañeros humanos.
– Acompañan a los niños en sus juegos.
– Las mascotas ayudan a las personas a ser más abiertas y sociables con los demás.
– En general, las personas invierten tiempo en educar a sus mascotas, por lo tanto si se trata de un perro o gato educado, ni notarás que ha estado en tu casa.
– Disfrutar de la naturaleza. Sobre todo si tienen un perro, tus huéspedes se verán obligados a salir varias veces al día y a explorar los alrededores mientras su perro juega y corre.
Pero no todo son cosas buenas. También existen algunos aspectos negativos derivados de la presencia de mascotas en las vacaciones, que ocurren sobre todo por la educación de los dueños y del cuidado y respeto que tengan por el alojamiento en que se encuentren, por ejemplo:
– Que la mascota sea ruidosa. Si hay un perro que ladra durante todo el día y la noche, ocasionará problemas y molestias con los vecinos.
– Si la mascota es muy grande, puede causar algún desperfecto o incomodidad.
– Olores: es posible que la arena del gato o unas deposiciones mal recogidas dejen un aroma poco agradable para los demás. Haz hincapié en que las mascotas y sus dueños deben ser lo más higiénicos posible.
– Mal comportamiento o descuido de los dueños. Si la mascota no está bien educada, puede causar situaciones incómodas para todos, incluso vinculadas con la seguridad.
Una manera de controlar el tipo de mascotas que acceden a tu casa es poner un límite de tamaño para aceptar mascotas (no más de 20kg, por ejemplo) para tener una garantía de que las mascotas que van a pasar las vacaciones en tus alojamiento no causen molestias ni daños mayores.
